Mi madre solía decirme que el amor de Dios es omnipotente y siempre que me hablaba de él, sus ojos se llenaban de lágrimas que no podía contener. Ella me decía hija nunca niegues de él, porque dios es maravilloso, con todo el ser.
Hoy al conmemorarse el día mundial de todas las madres, mis lágrimas no dejaron de brotar, al reflexionar sobre todo su consejo que ella de pequeña me sabia dar y lo bendecida que en sido como la flores en su rosal.
Al escuchar por las noticias, cuantas madres han sido abandonadas en un frío espacio como los es el asilo y sin llegar a obtener un tierno abrazo de sus primogénitos como se llegaron a olvidar de aquella madrecita que lo supo amamantar, cuando caían enfermos y nunca lo desprotegía defendiéndolo como la liebres que defiende a sus liebrecitas, o la leona que da todo por sus retoños.
Así son las madre que entrega todo sin esperar o recibir nada a cambio y felices los hijos que jamás olvida a su viejita que una vez le entregó todo su amor y su corazón. Madre sola hay una, y como ella ninguna.
Amigo recordemos que no todos tienen la dicha de contar con su madre viva, existen hijos que al nacer no tienen la dicha de ver, crecer, y poderle decir la dulce y maravillosa melodía de la artista mexicana Yolanda del Río ¨; “madrecita… querida, esta canción que canto… es solo para ti, por eso madre mía eres como el capullo de rosa que te entrego para ti”…
Feliz día a todas las madrecitas en su día, “gracias… madre, por toda tus enseñanza que me supiste dar” alcancé escuchar a un señor que al cementerio fue a visitar a su madre llorando en la tumba solo rosas pudo dejar me acerque a preguntarle que le pasaba y me contesto diciéndome hoy es el día de la madres… “al caminar para el cementerio pude observar por las calles a un señor que un beso a su madre le pudo dar y yo ni eso le puedo dar ya que ella aquí enterrada está”.
Recordemos que no es preciso ser el mes de mayo para decirle con todo el amor cuanto amamos, queremos, a cada una de las madrecita… no olvidemos ser detallista y no frio como el cemento o dejarla olvidada en un asilo para anciano.
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